Gutai – encarnación, personificación- (“Gu” – herramienta, medida, manera de hacer algo – “tai” – cuerpo) es uno de los colectivos de artistas más importantes de la posguerra japonesa todavía poco explorado en Occidente.
Fundado en 1945 por el artista y maestro Yoshihara Jirō comprende a dos generaciones de artistas a lo largo de 18 años, a quienes impulsó a romper los límites de las técnicas establecidas. “Hagan lo que nadie ha hecho”, era su lema.
En 1956, Yoshihara escribe el Manifiesto Gutai. Entre sus preocupaciones el manifiesto expresa la fascinación por la belleza que surge cuando las cosas se deterioran o se dañan. El proceso de deterioro o destrucción es celebrado como un camino para revelar la vida interior de un material u objeto determinado. Sin embargo lo que es interesante en este sentido es la belleza original que se encuentra en las obras de arte y arquitectura del pasado. Que han cambiado su apariencia debido a los daños del tiempo o de la destrucción por los desastres en el curso de los siglos. Esto se describe como la belleza de la decadencia, pero ¿no es tal vez la belleza que el material adopta cuando se libera del maquillaje artificial y revela sus características originales?
Para una nación recientemente derrotada en la segunda guerra mundial y emergiendo desde las sombras del totalitarismo, el colectivo Gutai hace un llamado a la vitalidad, al juego y a las nuevas fronteras artísticas. El grupo quería experimentar una relación distinta con los materiales, más cruda y directa.
Exposición Gutai en el Museo Guggenheim
Al igual que el art informal y el expresionismo abstracto, Gutai rechazó el automatismo psíquico eligiendo actos de materialidad corporal realizados en el mundo real. La implicación de Yoshihara con la revitalización de las artes tradicionales japonesas, específicamente la caligrafía japonesa, también influenció su idea de hacer arte como un encuentro experiencial no mediado entre artista, gesto y material. Shiraga Kazuo creó su obra “Untitled” (1957) pintando el suelo con sus pies descalzos y Murakami Saburō en “Passage” (1956) realizó una performance de pintura lanzándose a través de pantallas de papel tensas. Ambos siguen una de las ideas del grupo Gutai que quiere lanzar el “Grito de la materia misma”. En el ámbito de los eventos en vivo, los artistas Gutai ampliaron sus acciones al teatro, la música y el cine. El “Gutai Card Box” (1962) transformó el acto de ver las pinturas en una interacción, con el espectador comprando una obra del artista escondido dentro de una máquina automática.
Shiraga Kazuo
Los artistas Gutai inventaron formas de ir más allá de los estilos contemporáneos de la pintura abstracta intentando realizar cuadros concretos, borrando el significado representacional e incorporando la materia prima, así como el tiempo y el espacio, como material del arte. El trabajo de Tanaka Atsuko “Bell” (1955) reimagina la pintura como una composición acústica en directo a través de una secuencia sonora de campanas de alarma eléctricas. Su interés por las luces y la forma humana alcanzó la cumbre en su obra más conocida, Electric Dress (1956). El artista vistió este espectacular traje hecho de bombillas incandescentes intermitentes pintadas en amarillo brillante, verde, rojo y azul para su actuación durante Gutai Art on the Stage (1957).
Tanaka Atsuko, “Bell”
Como unos pioneros globales del arte medioambiental, los espacios participativos de Gutai toman la forma de esculturas abstractas orgánicas o geométricas que incorporan arte cinético, luz y sonido, convirtiendo estos espacios de exposición en caóticas guaridas de maquinarias chirriantes y palpitantes semejantes a organismos La escultura erótica de Yoshida Minoru “Bisexual Flower” (1969) explora los efectos psicodélicos de este enfoque. Las obras de Gutai se inspiraron en la arquitectura contemporánea, la tecnología y el diseño urbano para promover una estética futurista. Esto se puede ver en la armadura gigante de Nasaka Senkichirō compuesta de tuberías hidráulicas de aluminio perforadas con agujeros, que difundía una composición músical mientras zigzagueaba en el espacio de la exposición. Este sitio de creatividad es lo que Shiraga llamó “un espléndido patio de recreo” y lo que Yoshihara buscó como un “sitio libre que puede contribuir al progreso de la humanidad”.
Nasaka Senkichirō
Los artistas Gutai fueron una infuelcia formativa en el movimiento Fluxus. Anticiparon los happenings el performance y el arte conceptual; también crearon obras que ahora serian llamadas instalaciones inspirando el trabajo otros artistas como Nam June Paik, Wolf Vostell y Joseph Beuys y han sido a menudo citados como precursores del arte povera.
El grupo se disuelve en 1972 tras la muerte de Yoshihara.